SE
CELEBRÓ EL DIA DE LA INDUSTRIA NAVAL EN EL CONGRESO NACIONAL. Por Daniel
Estigarribia.
La
comunidad en general y la fluvio-marítima en particular fue citada por el
presidente de la Honorable Cámara de Diputados de la Nación Julián Andrés
Dominguez, por el Diputado Nacional Gastón Harispe y por la Mesa Nacional de
Concertación de la Industria Naval, para celebrar el Día de la Industria Naval,
en el Congreso Nacional.
Allí
se realizó el acto conmemorativo encabezado por el Diputado Nacional Gastón
Harispe, vice presidente de la Comisión de Intereses Marítimos, Fluviales,
Pesqueros y Portuarios y donde se encontraban presentes entre otros, el Diputado Carlos Kunkel, el diputado Héctor
Recalde, el Secretario General del Centros de Capitanes de Ultramar Marcos
Castro, el Secretario General del Sindicato de Argentino de Obreros Navales y
SINRA Juan Speroni, el Presidente de la Federación Industria Naval Argentina
Juan Antonio Torresín, el Subsecretario de Puertos y Vías Navegables ing.
Horacio Tettamanti, representantes del Consejo Profesional de Ingeniería Naval
y de la Asociación Argentina de la Industria Naval.
Los
Diputados presentes apoyan el proyecto de Ley (3349-D-15) de “Régimen de
Promoción de la Marina Mercante Nacional y la Industria Naval” junto a los miembros
de la Mesa Nacional de Concertación de la Industria Naval que coordina el Lic.
Miguel Angel Sanchez, presidente de la Asociación Bonaerense de la Industria
Naval acompañado por su vicepresidente Jorge Varela. Todos los presentes aunaron
voluntades una vez más en este acto, para celebrar este histórico día y para
incentivar la pronta sanción de la tan esperada ley.
Entre
los recientes esfuerzos realizados para actualizar y consensuar dicho proyecto,
se produjeron modificaciones, enriqueciendo el proyecto original, debatido desde
hace tiempo e insistiendo permanentemente sobre la necesidad de recuperar la
marina mercante en nuestro país y reactivar la industria naval, en el menor
tiempo posible.
Según
sus promotores, este proyecto reúne los intereses de todos los actores
involucrados y “fundamentalmente está en línea con la política de
desendeudamiento internacional y de recuperación de la matriz energética,
porque tiene como objetivo el desarrollo del litoral atlántico y la soberanía
nacional sobre ríos, puertos y costas, que espera ser aprobado antes del actual
período de sesiones del Congreso Nacional”.
El
proyecto original fue presentado el año pasado por el Diputado Nacional Gastón
Harispe (FpV), vicepresidente de la Comisión de Intereses Marítimos, Fluviales,
Pesqueros y Portuarios, quien señaló: “Estamos debatiendo en el Congreso en
torno a este proyecto de ley que es productivo, vinculado a los intereses de
los trabajadores, industriales y las economías regionales, combinando industria
naval y logística; y creemos que la industria naval tiene una gran oportunidad
a futuro, de proyección de mediano y largo plazo, que se da en el marco de un
Estado industrial que defiende los intereses populares”.
El
Proyecto de Ley “Régimen de Promoción de la Marina Mercante Nacional y la
Industria Naval”, contempla objetivos vinculados al sistema de transporte; la
construcción y reparación de navíos; la generación de empleo genuino; el
trabajo conjunto con las universidades para las carreras afines; la reducción
de los costos para las economías regionales y del
interior, y el abastecimiento del enorme mercado
que significa el Mercosur, entre otros aspectos.
Globalports
entrevistó al diputado Harispe quien expresó: “Creo que estamos cada vez más
cerca de que se consagre este proyecto de ley u otro proyecto de ley que tenga
en cuenta las dos aspectos, las dos mitades de la actividad industria
naval/marina mercante. La verdad es que si tuviéramos más cabeza podríamos
haber puesto en el mismo complejo legal, en el mismo complejo normativo la
hidrovía y los puertos. Podríamos haber puesto todo en un mismo lugar, habría
que trabajar mucho, ser mejores de lo que somos intelectualmente. Pero hasta
aquí hemos llegado, comprendiendo que la necesidad de la industria naval y la
marina mercante son polos de una contradicción dialéctica, por supuesto
complementaria, como son este tipo de contradicciones, necesarias para la
conectividad. Se necesitan mutuamente. Y la industria naval tiene una
oportunidad que encuentra a una marina mercante pequeña que ha quedado en la
Argentina, producto de la desnacionalización sufrida en los 90’s. puede volver
a ser una gran marina mercante nacional. Por eso no deberíamos confundirnos.
Algunos armadores que dicen defender la marina mercante no lo hacen, nosotros
queremos defender la marina mercante, queremos que haya empresarios argentinos,
que hagan crecer la actividad argentina poniendo el cincuenta y uno por ciento
(51%) de la acciones en la economía nacional. La marina mercante es una actividad
necesaria para el desarrollo nacional. Esta ley no es una ley de los marinos
mercantes, ni de los industriales nacionales: es una ley de los argentinos que
necesitamos de logística para la producción. Esto me parece un concepto vital.
Porque si no, parece ser que tenemos que arreglar con las corporaciones! Y
nosotros tenemos que arreglar con los argentinos. Debemos hacer que los
argentinos entiendan más de lo que estamos hablando. Respecto al proyecto en
sí, no estamos lejos, hay que reunir voluntades en el Congreso, estamos
hablando uno a uno con los diputados y esperamos que antes de fin de año,
podamos tener un plenario de comisiones que ponga en marcha el debate
(parlamentario)”.
Un poco de historia
sobre el 12 de setiembre Día de la Industria Naval:
Las primeras construcciones de buques
mercantes de poco calado destinados al tráfico fluvial fueron generados por
artesanos genoveses en varaderos de Buenos Aires en proximidades de la Boca del
Riachuelo y Dock Sud. Al generarse durante el siglo XX nuevas normas legales
que apoyaron estas construcciones en el país se produjo el desarrollo
definitivo de esta madre de industria. Del mismo, ya en los años 60 se creó
el Plan Esteverena, un proyecto de
construcción de buques para las empresas navieras del estado, que dió origen a
que el día 12 de septiembre fuera instituido como el Día de la Industria Naval
Argentina.
HISTAMAR nos recuerda : “La Empresa Líneas Marítimas
Argentinas (ELMA) presidida por el Contraalmirante Horacio Esteverena, que
había recibido su primer barco nuevo ese año, el “Lago Nahuel Huapi” encargado
a un astillero de la ex Yugoslavia, y ordenaba la construcción de un
nuevo barco de pasajeros a España, el “33 Orientales”. El 12 de septiembre de
1961, el Contraalmirante Esteverena, acompañado por un Directorio integrado por
navieros notables de la época, logró la firma por parte del Poder
Ejecutivo Nacional de un decreto fechado ese día, en el cual se establecía un
nuevo plan de renovación y expansión de la empresa estatal. El llamado Plan
Esteverena consistía en dos etapas. En la primera, se encargarían buques en el
exterior y en la segunda se encargarían buques exclusivamente a astilleros
nacionales. Este plan sentaba las bases políticas de largo plazo para el
desarrollo de la Industria Naval de nuestro país. El contrato inicial de
construcciones nacionales de ELMA fue firmado con Astilleros y Fábricas Navales
del Estado (AFNE, ahora Astillero Río Santiago) y el primer y único buque que
surgió de este plan fue el “Almirante Stewart”. Esteverena falleció al día
siguiente de firmar el contrato en un accidente de aviación en Brasil. El gran
impulso a la industria naval nacional que dió este plan de desarrollo fue
tomado como paradigma y es así que el 12 de septiembre se lo recuerda como el
Día de la Industria Naval.
El
marco histórico del Día de la Industria sigue encuadrando los esfuerzos que
realizan numerosos sectores vinculados a la misma en nuestros días, que pugnan
por recuperar para el desarrollo integral de nuestra Nación, nuevas marina mercante / industria
naval argentinas, especialmente como para que esta última siga brindando a la
comunidad su noble condición de ser Madre de Industrias como se la conoce, a
través de modernas normas legales y reglas claras de juego.
Industria
naval/marina mercante, ambas siendo dos caras de una misma moneda, integral e
indisolublemente unidas, para ser eficaces deben interactuar sincronizadamente
con los sectores vinculados a los puertos/vías
navegables/multimodalismo/dragado y balizamiento/ ciencia y
tecnología/seguridad/medio ambiente/comercio exterior/investigación y
desarrollo/tecnología/ingeniería, etc.
De esa manera ha sido y seguramente llegará a ser, una lucrativa fuente
de trabajo, produciendo significativos ahorros a los productores y de divisas
al país, entre otros beneficios tal como ser demandante de puestos de trabajo,
de beneficios laborales, de nuevos técnicos y profesionales, lo que se logra
con el aporte de los sectores académicos que tradicionalmente han brindado
conocimientos y capacidades a sus egresados, incuestionablemente serios y
calificados, aspectos hoy accesibles a todos los jóvenes y a todos niveles del
sector con niveles de calidad ampliamente reconocidos en el mundo entero.
Por Daniel Estigarribia
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